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Fecha: 03/03/2012
- Entre cachetadas, piquetes de ojo y mentadas, transportistas y ugocepistas ablandaron al delegado Regional del Transporte Público -La licencia de conducir de Jorge Ramón Mora, era autentica y fue detenido injustamente
Tierra Blanca.- La líder de la UGOCP Ángela Alonso Malpica y un nutrido grupo de conductores del servicio mixto rural y algunos taxistas, se concentraron desde las 11:30 horas en la avenida Francisco I. Madero entre Pedro García y 16 de Septiembre, frente a las instalaciones de la Doceava Delegación de Tránsito del Estado, en espera de la llegada de Álvaro Gabino González Hernández, Delegado Regional del Transporte Público con sede en Córdoba, quien venía a liberar las unidades que fueron detenidas por personal a su cargo, por diversas irregularidades que fueron detectadas en un operativo.
Los transportistas terrablanquenses se quejaban amargamente de la forma tan arbitraria y prepotente con la que actuaron los oficiales de Álvaro Gabino y reiteraron en diversas ocasiones no estar en contra de un reordenamiento vial, pero sí estar inconformes por la actitud tan déspota y grosera de los uniformados que los trataron peor que delincuentes y además violentaron sus derechos, pues incluso el taxista Jorge Ramón Mora Aguilar no tenía una licencia de conducir clonada, pues era auténtica expedida en los Estados Unidos de Norteamérica, donde él estuvo trabajando y al llegar hace algunos días a Tierra Blanca, no pudo contar con la licencia tipo “A” debido a que no había cursos de capacitación por parte del transporte público y utilizó su licencia de manejo expedida en Norteamérica y fue precisamente la Agencia del Ministerio Público Investigador la que determinó la autenticidad de la licencia, lo que originó el descontento en contra del personal del transporte público en una clara violación a los derechos de esta persona.
La gota que derramó el vaso fue el momento en que Ángela Alonso le pidió una explicación a Álvaro Gabino sobre este tipo de anomalías y el funcionario estatal no le hizo caso y la ignoró, por lo que en una segunda ocasión la líder ugocepista volvió a cuestionar al funcionario estatal y éste la trató de loca y esto molestó a los ugocepistas que por tercera ocasión volvieron a cuestionar al funcionario estatal y al hacer caso omiso e ignorarlos los choferes arremetieron en contra de su humanidad.
La puerta del privado de la Delegación fue cerrada por los mismos choferes y sólo se escuchaban gritos y golpes, y la voz del Delegado Regional del Transporte Público que decía “señor director, me están golpeando, llame a la Marina, llame a Seguridad Pública” y sólo se escuchaba que le contestaban “suspende la reunión”, mientras que la líder de la UGOCP contestaba “se suspende madres, eso querían y así como trataron a nuestros compañeros con prepotencia, así los vamos a tratar y si quieren diálogo por la buena, por las buenas los vamos a tratar”.
Después de unos minutos de fricción, la situación se tranquilizó y nuevamente empezaron las negociaciones.
Los taxistas de Tierra Blanca también se mostraron inconformes en contra del transporte público regional, pues señalan que se tenía que haber aplicado solamente una infracción y no haber detenido las unidades de manera tan arbitraria, en medio de insultos y amenazas con encarcelarlos, “nosotros no somos ningunos delincuentes”, mencionaba Ernesto Lila, líder de los taxistas.
Fue a las 16:00 horas cuando todo terminó en completa calma y el Delegado Regional del Transporte Público Álvaro Gabino González Hernández, se retiró de Tierra Blanca con los ojos enrojecidos y el rostro colorado.
Los transportistas terrablanquenses se quejaban amargamente de la forma tan arbitraria y prepotente con la que actuaron los oficiales de Álvaro Gabino y reiteraron en diversas ocasiones no estar en contra de un reordenamiento vial, pero sí estar inconformes por la actitud tan déspota y grosera de los uniformados que los trataron peor que delincuentes y además violentaron sus derechos, pues incluso el taxista Jorge Ramón Mora Aguilar no tenía una licencia de conducir clonada, pues era auténtica expedida en los Estados Unidos de Norteamérica, donde él estuvo trabajando y al llegar hace algunos días a Tierra Blanca, no pudo contar con la licencia tipo “A” debido a que no había cursos de capacitación por parte del transporte público y utilizó su licencia de manejo expedida en Norteamérica y fue precisamente la Agencia del Ministerio Público Investigador la que determinó la autenticidad de la licencia, lo que originó el descontento en contra del personal del transporte público en una clara violación a los derechos de esta persona.
La gota que derramó el vaso fue el momento en que Ángela Alonso le pidió una explicación a Álvaro Gabino sobre este tipo de anomalías y el funcionario estatal no le hizo caso y la ignoró, por lo que en una segunda ocasión la líder ugocepista volvió a cuestionar al funcionario estatal y éste la trató de loca y esto molestó a los ugocepistas que por tercera ocasión volvieron a cuestionar al funcionario estatal y al hacer caso omiso e ignorarlos los choferes arremetieron en contra de su humanidad.
La puerta del privado de la Delegación fue cerrada por los mismos choferes y sólo se escuchaban gritos y golpes, y la voz del Delegado Regional del Transporte Público que decía “señor director, me están golpeando, llame a la Marina, llame a Seguridad Pública” y sólo se escuchaba que le contestaban “suspende la reunión”, mientras que la líder de la UGOCP contestaba “se suspende madres, eso querían y así como trataron a nuestros compañeros con prepotencia, así los vamos a tratar y si quieren diálogo por la buena, por las buenas los vamos a tratar”.
Después de unos minutos de fricción, la situación se tranquilizó y nuevamente empezaron las negociaciones.
Los taxistas de Tierra Blanca también se mostraron inconformes en contra del transporte público regional, pues señalan que se tenía que haber aplicado solamente una infracción y no haber detenido las unidades de manera tan arbitraria, en medio de insultos y amenazas con encarcelarlos, “nosotros no somos ningunos delincuentes”, mencionaba Ernesto Lila, líder de los taxistas.
Fue a las 16:00 horas cuando todo terminó en completa calma y el Delegado Regional del Transporte Público Álvaro Gabino González Hernández, se retiró de Tierra Blanca con los ojos enrojecidos y el rostro colorado.
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