26 de Marzo del 2012
¨Tuve la ¨forturna¨ de conocer a Calderón hace 15 años. Deleznable, arrogante (mamón), cerrado, ambicioso, hipócrita, trapero, corrupto, cínico… todo lo que te diga es poco. Cuando lo ¨eligieron¨ candidato (después de haber apuñalado a Carlos Medina Plascencia como nadie nunca se imaginó) ESE DIA dije, el PAN se acabó. Este no es el partido que yo conocía, al que me afilié, y en el que creía. Y claro, ya en decadencias (gracias al Zorro) Calderón terminó por hundirlo en ese agujero de intereses, cuadros, favoritismos, amiguismos, mediocridad, suciedad y corrupción. Lo peor del PRI, pero a lo bestia¨.
Así se expresa un muy querido amigo con el que siempre he discutido sobre tendencias políticas. Un hombre que abrió Wall Street al Zorro, es decir a Fox, cuando era candidato. Quien siempre tuvo palabras de defensa para la derecha política mexicana. Hoy me sorprende su punto de vista.
Durante muchos años vía correo electrónico ha defendido abiertamente al PAN y a sus miembros. Admirador de Gerardo Buganza, ha apoyado en más de una ocasión a Juan Bueno Torio cuando ha asistido a Nueva York, pues allí trabaja en el área financiera de un banco, en su calidad de analista para Latinoamérica. Su trabajo consiste en evaluar las políticas públicas y los acontecimientos sociales para medir los riesgos económicos y de inversión.
No es posible afirmar que quien se expresa como lo indica el primer párrafo de esta colaboración es un hombre mal informado. Si acaso se le puede acusar de que la distancia puede distorsionar su visión, pero también sabemos que estar fuera del país, en particular en New York permite tener información y una visión mucho más realista que quienes estamos dentro de México recibiendo exclusivamente la información que el régimen permite se conozca.
Ni siquiera de los partidos de oposición había yo escuchado opiniones tan duras sobre nuestro presidente. El PRI siempre ha sido mesurado, sobre todo desde que las encuestas que posee le han indicado que la guerra sucia no es del agrado de la población, a pesar de los resultados que obtuvo el español Solá, hace seis años con su propaganda de ¨peligro para México¨, que junto con los errores propios de AMLO, lo bajaron de su lugar de privilegio en el 2006. El grupo de partidos de izquierda siempre ha sido mucho más duro con ¨Pedipe¨ (así le dicen últimamente), pero no han llegado a los niveles con que se expresa este amigo, que ha sido activista y panista de corazón.
Pensar que lo peor que le pudo pasar al PAN es que Calderón haya ganado la presidencia, es un planteamiento muy interesante, pues hemos visto desdibujarse la mística panista, aquélla de la justicia, la ética, el bien común, convertida en conveniencia de gobierno, corrupción ya documentada, y sobre todo, falta de capacidad de gobierno, entre muchas críticas que se hacen públicas por parte de no simpatizantes, y que se comentan a sotto vocce dentro de los círculos panistas, en los cuales ya existe una verdadera rebelión, ante las protestas de la propia conciencia ante la obligación de defender a un gobierno que cada día resulta más indefendible. Sólo los más fanáticos y recalcitrantes afirman que la violación a las leyes es necesaria, o que es correcto iniciar una guerra contra el narco (necesaria por cierto), sin saber que se va a hacer ni medir el daño colateral (50,000 muertos, 10,000 cadáveres sin identificar, 250,000 desaparecidos). Sobre todo sostener a funcionarios que claramente violan de manera consuetudinaria las leyes en su propio beneficio, es algo que hiere la sensibilidad de los verdaderos panistas, quienes van a anular su voto, pues no están dispuestos a votar por más de lo mismo.
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