*Relevo ordenado y transparente
*Coinciden Calderón y Peña
Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto coincidieron la tarde de ayer en Los Pinos en que la transición gubernamental entre el actual gobierno y el que entrará en funciones el 1 de diciembre sea ordenada, apegada a derecho, transparente y en clara y señalada estabilidad del país en el ámbito económico, social y de gobernabilidad de manera que no se interrumpa el funcionamiento de la administración ni durante ese proceso ni tampoco al inicio de la próxima.
En su primer encuentro oficial como Presidentes de la República en funciones y electo, el actual mandatario aseguró que el país tiene sólidas bases en materia económica, social, política y de seguridad, que son un importante punto de partida para el nuevo gobierno.
Ambos sostuvieron una cordial reunión privada con quienes encabezan los equipos de transición y después dieron cuenta de ella ante los reporteros de la fuente de la Presidencia de la República, sin que hubiera preguntas de éstos.
Primero en hablar ante los representantes de los medios de comunicación, Peña Nieto dijo que ese proceso ha dado inicio y agradeció públicamente el apoyo institucional que le ha ofrecido y brindado el presidente Calderón a su recién integrado equipo para que la transición sea ordenada, apegada a derecho y transparente, como así lo señaló el mismo Ejecutivo Federal y dijo estar convencido de que con esta apertura y buena disposición del actual gobierno, le será de gran utilidad en estos casi tres meses para recoger diagnósticos e información que le permita, con mayor precisión, orientar las acciones y políticas públicas que habrá de instrumentar para cumplir los compromisos que hizo a lo largo de su campaña y también las expectativas que tiene la sociedad mexicana.
Destacó el presidente electo que el inicio de los trabajos para la transición dan cuenta y acreditan el avance democrático que hoy tiene el país y que hace posible que la renovación y la titularidad en el Poder Ejecutivo sea ordenada, transparente y en clara y señalada estabilidad para todo el país.
En su turno, el presidente Calderón dijo haber felicitado a su sucesor por la declaratoria de validez de la elección y la entrega de la constancia de mayoría por parte del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación y reiterarle su disposición personal y la de toda la Administración Pública para que la transición sea ordenada, transparente y eficaz, luego de lo cual comentó que en la reunión se abordaron diversos temas, muchos de los que más importan a los mexicanos, entre ellos los de seguridad y la marcha de la economía.
Agregó que el objetivo es que la transición se realice de la manera más tersa posible, en un entorno de estabilidad política y económica y que la ciudadanía no se vea afectada en cuanto a los servicios públicos y los apoyos que recibe de parte del gobierno federal y reiteró el llamado que hizo en su sexto mensaje de gobierno para que todos los mexicanos respaldemos en esencia al próximo Presidente de la República, más allá de cualquier diferencia política e ideológica porque “un Presidente necesita de la colaboración de todos los mexicanos para sacar adelante al país”.
Le reiteró su felicitación a Peña Nieto y le deseó éxito personal y a su gobierno e hizo votos, como Presidente y ciudadano, para que en el futuro se impulsen las reformas que México necesita para consolidarse como la nación próspera que todos queremos y ofreció su disposición de colaborar y respaldar en todos aquellos cambios que beneficien al país y se congratuló de que en las primeras conversaciones sostenidas haya habido una serie de coincidencias, lo que facilitará la transición.
El Ejecutivo Federal estuvo acompañado de los secretarios de Gobernación, Alejandro Poiré, y de Hacienda, José Antonio Meade y del jefe de la Oficina de la Presidencia, Gerardo Ruiz Mateos y el Presidente Electo de Luis Videgaray Caso, su coordinador para la Transición Gubernamental, y de Miguel Angel Osorio Chong, que lo es de Política y Seguridad.
Fue un primer y cordial primer encuentro que se da, como lo señaló Peña Nieto, en el marco de “la normalidad democrática y de la solidez institucional del país”.
Algo que desde la oposición de izquierda, resentida por la segunda derrota consecutiva de quien fue su candidato presidencial, niegan y rechazan, más por costumbre que por otras causas.
De esto y de aquello…
Aun cuando hasta anoche no había respuesta alguna de Andrés Manuel López Obrador, a la aceptación a un eventual diálogo con Enrique Peña Nieto, condicionado a que lo reconozca como presidente electo, no se necesita especular siquiera cual será y en qué tono… Y es que tras de que la noche misma de la elección, y desde entonces, el derrotado ex candidato del Movimiento Progresista se negó a aceptar el resultado que le fue contundentemente adverso… No por 246 mil 934 votos, para un 0.56 por ciento de la votación nacional, como en 2006, sino por tres millones 309 265 mil votos, un 6.62 por ciento, el 1 de julio pasado… El por segunda vez consecutiva derrotado ex abanderado de los partidos de izquierda se la ha pasado despotricando contra el ganador de la elección y su partido, acusándolos de la coacción y compra de votos, de rebasar los topes de campaña y hasta de utilizar recursos de procedencia ilícita… Sus andanadas han alcanzado por igual a quienes fueron funcionarios de casillas, que a consejeros del IFE, magistrados del Tribunal Electoral, empresarios y medios de comunicación, a los que culpa de su segundo fracaso consecutivo al ir en pos de la Presidencia de la República… Después de todo eso, francamente no hay quien crea que el tabasqueño vaya a aceptar, ya no se diga reconocer a Peña Nieto como presidente electo, sino mucho menos sentarse a dialogar con éste… La aceptación a ese eventual encuentro de parte del mexiquense fue en respuesta a la pregunta que le formuló Joaquín López-Dóriga en su noticiario nocturno de Televisa durante la entrevista que le hizo anteayer y que el conductor presentó anteanoche y anoche… En su primera aparición pública desde que el Tribunal Electoral lo declaró presidente electo, Peña Nieto asistió al primer informe de su sucesor en el gobierno del estado de México, Eruviel Avila, en el teatro Morelos de Toluca, en medio de un impresionante operativo de seguridad, por tierra y aire en los alrededores de ese inmueble, declarado recinto oficial del congreso local… La presencia del próximo Presidente de la República a ese informe, obligó a que se le recomendara al gobernador priísta de Hidalgo, José Francisco Olvera Ruiz a mantener un “bajo perfil” en el que él rindió en Pachuca… Eso motivó que el segundo informe de Olvera Ruiz, volviera a pasar inadvertido, dentro pero sobre todo fuera de la vecina entidad, como ocurrió con el primero que, por razones de ajuste en el calendario electoral, rindió a los cinco meses de asumir el cargo, el 1 de abril del año pasado… Ya habrá tiempo para que el mandatario hidalguense disfrute de reflectores y muestre los resultados de su obra de gobierno, que no es poca a pesar del corto tiempo que lleva en esa responsabilidad… El general brigadier Roberto Miranda Moreno, quien está a cargo de la seguridad del presidente electo Enrique Peña Nieto, es ciertamente homónimo del general de división retirado, Roberto Miranda Sánchez, quien fuera jefe del Estado Mayor Presidencial en el sexenio de Ernesto Zedillo y que recientemente externó su interés en ser el próximo secretario de la Defensa Nacional… La confusión de nombres se originó porque quienes elaboraron la kilométrica lista de ¡46! integrantes del equipo de transición, por prisa, cansancio o el mexicanísmo “ai se va”, no incluyeron el apellido materno de quien seguramente será jefe del EMP del próximo Presidente de la República… Nacido hace 57 años, el militar morelense desempeñó labores de inteligencia y contrainteligencia y era subjefe Operativo del Estado Mayor Presidencial, cargo que desempeñó hasta el lunes en que se le encomendó la del presidente electo… A Felipe Solís Acero, el ex diputado que es hoy responsable jurídico de la Coordinación de Política y Seguridad que encabeza Miguel Angel Osorio Chong en el equipo de transición de Peña Nieto, lo salvó la campana… Y es que justo cuando lo habían comprometido a que se fuera de secretario general de gobierno en su natal Tamaulipas, recibió la invitación para incorporarse a esa nueva tarea, lo que le evitó irse a lidiar problemas en un estado controlado por los cárteles de la droga… Por cierto que el anunciado equipo que acompañará al presidente electo de aquí al 30 de noviembre, motivó doble malestar: uno, entre los que fueron nombrados, porque ya fueron advertidos de que no se hagan ilusiones de que formarán parte del gabinete y otro, de los que esperaban a estar y fueron ignorados, convencidos como están algunos de que tampoco serán llamados a nada… Marco Antonio Blázquez, senador del PT que llegó al escaño por el PRD, ya definió el futuro de Andrés Manuel López Obrador: no será nuevamente “presidente legítimo” sino que se convertirá en “líder nacional” para buscar su tercera candidatura presidencial en 2018… Claro, si es que para entonces se lo permiten los años y achaques que su organismo ya empezó a resentir por tanta rabieta…
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En su primer encuentro oficial como Presidentes de la República en funciones y electo, el actual mandatario aseguró que el país tiene sólidas bases en materia económica, social, política y de seguridad, que son un importante punto de partida para el nuevo gobierno.
Ambos sostuvieron una cordial reunión privada con quienes encabezan los equipos de transición y después dieron cuenta de ella ante los reporteros de la fuente de la Presidencia de la República, sin que hubiera preguntas de éstos.
Primero en hablar ante los representantes de los medios de comunicación, Peña Nieto dijo que ese proceso ha dado inicio y agradeció públicamente el apoyo institucional que le ha ofrecido y brindado el presidente Calderón a su recién integrado equipo para que la transición sea ordenada, apegada a derecho y transparente, como así lo señaló el mismo Ejecutivo Federal y dijo estar convencido de que con esta apertura y buena disposición del actual gobierno, le será de gran utilidad en estos casi tres meses para recoger diagnósticos e información que le permita, con mayor precisión, orientar las acciones y políticas públicas que habrá de instrumentar para cumplir los compromisos que hizo a lo largo de su campaña y también las expectativas que tiene la sociedad mexicana.
Destacó el presidente electo que el inicio de los trabajos para la transición dan cuenta y acreditan el avance democrático que hoy tiene el país y que hace posible que la renovación y la titularidad en el Poder Ejecutivo sea ordenada, transparente y en clara y señalada estabilidad para todo el país.
En su turno, el presidente Calderón dijo haber felicitado a su sucesor por la declaratoria de validez de la elección y la entrega de la constancia de mayoría por parte del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación y reiterarle su disposición personal y la de toda la Administración Pública para que la transición sea ordenada, transparente y eficaz, luego de lo cual comentó que en la reunión se abordaron diversos temas, muchos de los que más importan a los mexicanos, entre ellos los de seguridad y la marcha de la economía.
Agregó que el objetivo es que la transición se realice de la manera más tersa posible, en un entorno de estabilidad política y económica y que la ciudadanía no se vea afectada en cuanto a los servicios públicos y los apoyos que recibe de parte del gobierno federal y reiteró el llamado que hizo en su sexto mensaje de gobierno para que todos los mexicanos respaldemos en esencia al próximo Presidente de la República, más allá de cualquier diferencia política e ideológica porque “un Presidente necesita de la colaboración de todos los mexicanos para sacar adelante al país”.
Le reiteró su felicitación a Peña Nieto y le deseó éxito personal y a su gobierno e hizo votos, como Presidente y ciudadano, para que en el futuro se impulsen las reformas que México necesita para consolidarse como la nación próspera que todos queremos y ofreció su disposición de colaborar y respaldar en todos aquellos cambios que beneficien al país y se congratuló de que en las primeras conversaciones sostenidas haya habido una serie de coincidencias, lo que facilitará la transición.
El Ejecutivo Federal estuvo acompañado de los secretarios de Gobernación, Alejandro Poiré, y de Hacienda, José Antonio Meade y del jefe de la Oficina de la Presidencia, Gerardo Ruiz Mateos y el Presidente Electo de Luis Videgaray Caso, su coordinador para la Transición Gubernamental, y de Miguel Angel Osorio Chong, que lo es de Política y Seguridad.
Fue un primer y cordial primer encuentro que se da, como lo señaló Peña Nieto, en el marco de “la normalidad democrática y de la solidez institucional del país”.
Algo que desde la oposición de izquierda, resentida por la segunda derrota consecutiva de quien fue su candidato presidencial, niegan y rechazan, más por costumbre que por otras causas.
De esto y de aquello…
Aun cuando hasta anoche no había respuesta alguna de Andrés Manuel López Obrador, a la aceptación a un eventual diálogo con Enrique Peña Nieto, condicionado a que lo reconozca como presidente electo, no se necesita especular siquiera cual será y en qué tono… Y es que tras de que la noche misma de la elección, y desde entonces, el derrotado ex candidato del Movimiento Progresista se negó a aceptar el resultado que le fue contundentemente adverso… No por 246 mil 934 votos, para un 0.56 por ciento de la votación nacional, como en 2006, sino por tres millones 309 265 mil votos, un 6.62 por ciento, el 1 de julio pasado… El por segunda vez consecutiva derrotado ex abanderado de los partidos de izquierda se la ha pasado despotricando contra el ganador de la elección y su partido, acusándolos de la coacción y compra de votos, de rebasar los topes de campaña y hasta de utilizar recursos de procedencia ilícita… Sus andanadas han alcanzado por igual a quienes fueron funcionarios de casillas, que a consejeros del IFE, magistrados del Tribunal Electoral, empresarios y medios de comunicación, a los que culpa de su segundo fracaso consecutivo al ir en pos de la Presidencia de la República… Después de todo eso, francamente no hay quien crea que el tabasqueño vaya a aceptar, ya no se diga reconocer a Peña Nieto como presidente electo, sino mucho menos sentarse a dialogar con éste… La aceptación a ese eventual encuentro de parte del mexiquense fue en respuesta a la pregunta que le formuló Joaquín López-Dóriga en su noticiario nocturno de Televisa durante la entrevista que le hizo anteayer y que el conductor presentó anteanoche y anoche… En su primera aparición pública desde que el Tribunal Electoral lo declaró presidente electo, Peña Nieto asistió al primer informe de su sucesor en el gobierno del estado de México, Eruviel Avila, en el teatro Morelos de Toluca, en medio de un impresionante operativo de seguridad, por tierra y aire en los alrededores de ese inmueble, declarado recinto oficial del congreso local… La presencia del próximo Presidente de la República a ese informe, obligó a que se le recomendara al gobernador priísta de Hidalgo, José Francisco Olvera Ruiz a mantener un “bajo perfil” en el que él rindió en Pachuca… Eso motivó que el segundo informe de Olvera Ruiz, volviera a pasar inadvertido, dentro pero sobre todo fuera de la vecina entidad, como ocurrió con el primero que, por razones de ajuste en el calendario electoral, rindió a los cinco meses de asumir el cargo, el 1 de abril del año pasado… Ya habrá tiempo para que el mandatario hidalguense disfrute de reflectores y muestre los resultados de su obra de gobierno, que no es poca a pesar del corto tiempo que lleva en esa responsabilidad… El general brigadier Roberto Miranda Moreno, quien está a cargo de la seguridad del presidente electo Enrique Peña Nieto, es ciertamente homónimo del general de división retirado, Roberto Miranda Sánchez, quien fuera jefe del Estado Mayor Presidencial en el sexenio de Ernesto Zedillo y que recientemente externó su interés en ser el próximo secretario de la Defensa Nacional… La confusión de nombres se originó porque quienes elaboraron la kilométrica lista de ¡46! integrantes del equipo de transición, por prisa, cansancio o el mexicanísmo “ai se va”, no incluyeron el apellido materno de quien seguramente será jefe del EMP del próximo Presidente de la República… Nacido hace 57 años, el militar morelense desempeñó labores de inteligencia y contrainteligencia y era subjefe Operativo del Estado Mayor Presidencial, cargo que desempeñó hasta el lunes en que se le encomendó la del presidente electo… A Felipe Solís Acero, el ex diputado que es hoy responsable jurídico de la Coordinación de Política y Seguridad que encabeza Miguel Angel Osorio Chong en el equipo de transición de Peña Nieto, lo salvó la campana… Y es que justo cuando lo habían comprometido a que se fuera de secretario general de gobierno en su natal Tamaulipas, recibió la invitación para incorporarse a esa nueva tarea, lo que le evitó irse a lidiar problemas en un estado controlado por los cárteles de la droga… Por cierto que el anunciado equipo que acompañará al presidente electo de aquí al 30 de noviembre, motivó doble malestar: uno, entre los que fueron nombrados, porque ya fueron advertidos de que no se hagan ilusiones de que formarán parte del gabinete y otro, de los que esperaban a estar y fueron ignorados, convencidos como están algunos de que tampoco serán llamados a nada… Marco Antonio Blázquez, senador del PT que llegó al escaño por el PRD, ya definió el futuro de Andrés Manuel López Obrador: no será nuevamente “presidente legítimo” sino que se convertirá en “líder nacional” para buscar su tercera candidatura presidencial en 2018… Claro, si es que para entonces se lo permiten los años y achaques que su organismo ya empezó a resentir por tanta rabieta…
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