Acaba con el león y el resto de la selva temblará de miedo. Camelot.
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Transcurrieron los gritos y todos pegaron de gritos. Entra el Congreso en una nueva dinámica. Quieren sangre en ese circo romano donde se legisla. Los priístas ya quieren poquitos plurinominales, la población, las que los llevó allí con su voto, no quieren a ninguno.
Es tiempo que demuestren que vamos a salir de la mediocridad, como bien le dijo José Angel Gurria, presidente de la Organización para la Cooperacion y el Desarrollo Economicos, a Peña Nieto.
Tiene el PRI, eso si, en sus economistas, lo mejor que ha parido esta nación. En los gobiernos de Vicente Fox y de Felipe Calderón, muchos de los economistas que simpatizaban con el PRI colaboraron en esos gobiernos de alternancia.
Terminaron las campañas y un nuevo rey llegará a Los Pinos.
Chavo y guapo. Sin haber leído tres libros en su vida, pero con la apetencia de conocer y saber y procurar gobernar por el bien de los que menos tienen.
Porque los que ya tienen, pueden solitos.
Hay que sacar las armas y comenzar las disputas.
Un tema que caló en grande y que dejó muy mal paradas a la mayoría de las casas encuestadoras, fue el fenómeno mediatico de las encuestas.
El PRD ya pidió en la cámara prohibirlas. Y la pena sería cárcel. En Almoloya, diría uno de la tribu. Porque las penas pecunarias no sirven de nada. Se paga y se va.
Carcel, como en los tiempos de Richeliu o en los de la Inquisición.
Atrás del perredista Martí Batres, llegó el panista, Roberto Gil Zuarth, jefe de la campaña de Chepina que se fue a la cocina.
Él presentó en el Senado una iniciativa que propone regular las encuestas señalando quién las paga y si el encargado de hacerlas tiene vínculos con algún partido político.
Bah, esa es pena menor. Si descubren quién las paga y si tiene vinculo con partido alguno, no pasa nada. Lo exhiben, pero él acusado exhibe su cachaza y todos a la sonrisa.
Las encuestas de la elección presidencial pasada dejaron mucho que desear. Las de Ciro Gomez Leyva, en Milenio, resultaron tan fallidas que el comunicador tuvo que ofrecer disculpas a todo México, por lo chafa y balines que resultaron.
Así horadaron a Andrés Manuel, encuesta tras encuesta diaria desalentaba a los votantes. Iba muy abajo. A veces en tercero, otras, lo trepaban al segundo sitio.
Puro choro. Puro rollo.
Pero llegó la Noche de los cuchillos largos y otro México nacerá de este rebumbio, donde los encuestologos enloquecieron todos y salieron mas balines que el Orfis, que no sirve para nada. Aún con interino.
¿Qué tendrá el Orfis que todos le quieren entrar?
Karime Aguilera Guzman, diputada por La Antigua, que también es pueblo, quiere dejar la curul de levanta-dedos en el Congreso veracruzano, donde le falta año y medio, y sacrificar un año de diputada para canjearlos por 7 años en el area técnica de la obra publica del Orfis, lugar donde en el mar la vida es mas sabrosa y donde se aprieta el cogote a los alcaldes para que aflojen el cuerpo.
La máxima de la politca debe ser aquella de Gregorio Marañón: “En la oposición de los hombres frente a los cargos públicos hay una absoluta oposición entre el querer y el deber. El que quiere un puesto es que no debe ocuparlo. El que lo ocupa y lo quiere conservar es que se debe ir. El que quiere irse, debe quedarse. Por la magnitud del deseo de irse se mide la necesidad de quedarse”.
Es por eso que los 17 mil 435 inscritos en el Orfis cuentan los días.
Ven el reloj y oyen la vieja rola de Cantoral y los que puntean le piden que apresure las horas, porque van a enloquecer.
Reloj deten tu camino, porque el Orfis se me va.
CORREO LECTOR
Gilberto, tu no me conoces y yo tampoco, pero leo tu columna todos los dias, un poco atrasada, pero ni modo, solo para decirte que estoy de acuerdo contigo, algun dia la izquierda gobernara este pais y me da mucho gusto leer a alguien imparcial que analiza sin juzgar a AMLO, realmente es mas interesante su pocision que la de Sicilia, ojala un dia puedas visitarme, estoy en el Patio Muños ( Pino Suares no. 38 interior 21, zona centro, a tres cuadras de la Casona del Beaterio ) saludos Gerardo Luna Gomez Martinez.
Es tiempo que demuestren que vamos a salir de la mediocridad, como bien le dijo José Angel Gurria, presidente de la Organización para la Cooperacion y el Desarrollo Economicos, a Peña Nieto.
Tiene el PRI, eso si, en sus economistas, lo mejor que ha parido esta nación. En los gobiernos de Vicente Fox y de Felipe Calderón, muchos de los economistas que simpatizaban con el PRI colaboraron en esos gobiernos de alternancia.
Terminaron las campañas y un nuevo rey llegará a Los Pinos.
Chavo y guapo. Sin haber leído tres libros en su vida, pero con la apetencia de conocer y saber y procurar gobernar por el bien de los que menos tienen.
Porque los que ya tienen, pueden solitos.
Hay que sacar las armas y comenzar las disputas.
Un tema que caló en grande y que dejó muy mal paradas a la mayoría de las casas encuestadoras, fue el fenómeno mediatico de las encuestas.
El PRD ya pidió en la cámara prohibirlas. Y la pena sería cárcel. En Almoloya, diría uno de la tribu. Porque las penas pecunarias no sirven de nada. Se paga y se va.
Carcel, como en los tiempos de Richeliu o en los de la Inquisición.
Atrás del perredista Martí Batres, llegó el panista, Roberto Gil Zuarth, jefe de la campaña de Chepina que se fue a la cocina.
Él presentó en el Senado una iniciativa que propone regular las encuestas señalando quién las paga y si el encargado de hacerlas tiene vínculos con algún partido político.
Bah, esa es pena menor. Si descubren quién las paga y si tiene vinculo con partido alguno, no pasa nada. Lo exhiben, pero él acusado exhibe su cachaza y todos a la sonrisa.
Las encuestas de la elección presidencial pasada dejaron mucho que desear. Las de Ciro Gomez Leyva, en Milenio, resultaron tan fallidas que el comunicador tuvo que ofrecer disculpas a todo México, por lo chafa y balines que resultaron.
Así horadaron a Andrés Manuel, encuesta tras encuesta diaria desalentaba a los votantes. Iba muy abajo. A veces en tercero, otras, lo trepaban al segundo sitio.
Puro choro. Puro rollo.
Pero llegó la Noche de los cuchillos largos y otro México nacerá de este rebumbio, donde los encuestologos enloquecieron todos y salieron mas balines que el Orfis, que no sirve para nada. Aún con interino.
¿Qué tendrá el Orfis que todos le quieren entrar?
Karime Aguilera Guzman, diputada por La Antigua, que también es pueblo, quiere dejar la curul de levanta-dedos en el Congreso veracruzano, donde le falta año y medio, y sacrificar un año de diputada para canjearlos por 7 años en el area técnica de la obra publica del Orfis, lugar donde en el mar la vida es mas sabrosa y donde se aprieta el cogote a los alcaldes para que aflojen el cuerpo.
La máxima de la politca debe ser aquella de Gregorio Marañón: “En la oposición de los hombres frente a los cargos públicos hay una absoluta oposición entre el querer y el deber. El que quiere un puesto es que no debe ocuparlo. El que lo ocupa y lo quiere conservar es que se debe ir. El que quiere irse, debe quedarse. Por la magnitud del deseo de irse se mide la necesidad de quedarse”.
Es por eso que los 17 mil 435 inscritos en el Orfis cuentan los días.
Ven el reloj y oyen la vieja rola de Cantoral y los que puntean le piden que apresure las horas, porque van a enloquecer.
Reloj deten tu camino, porque el Orfis se me va.
CORREO LECTOR
Gilberto, tu no me conoces y yo tampoco, pero leo tu columna todos los dias, un poco atrasada, pero ni modo, solo para decirte que estoy de acuerdo contigo, algun dia la izquierda gobernara este pais y me da mucho gusto leer a alguien imparcial que analiza sin juzgar a AMLO, realmente es mas interesante su pocision que la de Sicilia, ojala un dia puedas visitarme, estoy en el Patio Muños ( Pino Suares no. 38 interior 21, zona centro, a tres cuadras de la Casona del Beaterio ) saludos Gerardo Luna Gomez Martinez.
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