Hoy que ya está cerca el fin de año

COLABORACION  ESPECIAL  

por: ERIKA NAVA ACOSTA

Hoy que ya está cerca el fin de año, descubre que cierras un volumen más de la historia de tu vida. Cuando comenzaste este libro, era todo tuyo, te lo puso Dios en tus manos, un libro en blanco, podrías hacer con él lo que tú quisieras, un poema, una pesadilla, una oración. Podrías, pero HOY ya no puedes, no es  tuyo, ya lo has escrito, ahora es de Dios. El te lo va a leer completo con todos sus detalles, el día que mueras. Hoy ya no puedes corregirlo, ha pasado al dominio de la eternidad; piensa unos momentos, en ésta tu última noche del año, toma tu libro y léelo despacio, hojéalo, deja pasar sus páginas por tus manos y por tu conciencia, ten el placer de leerte a ti mismo. Lee todo, repite aquellas páginas de tu vida en las que pusiste tu mejor esfuerzo. Lee aquellas otras que nunca quisiste haber escrito, no, no, no intentes arrancarlas es inútil, ten valor para leerlas, son tuyas no puedes destruirlas, pero sí puedes aprender de ellas, y procurar enmendarlo todo  cuando escribas el volumen siguiente, y  si lo haces así Dios pasará de corrido lo no tan bueno, cuando lea tu libro en el último día de tu vida. Repasa tu libro en esta última noche del año, hay en él un reflejo de ti mismo, es una aventura, un drama apasionante, en el que tú eres el primer personaje.

Hoy que ya está cerca el fin del año, leo mi libro, y doy gracias a todos los que participaron en él, un millón de gracias a todos, tanto a los buenos como a los no tan buenos, porque de todos ellos recibí importantes lecciones, doy gracias al que me hizo llorar, porque me ha hecho más fuerte, doy gracias al que me hizo reír, porque han dado alimento a mi alma y mi corazón para vivir. Agradezco a todos los que me prestaron oídos a mis momentos de desasosiego, mil gracias por ser un hombro en el cual apoyarme. A todos aquellos que han preferido sembrar discordias, en lugar de sembrar armonía, a todos que han preferido construir muros, en lugar de construir puentes, los invito a reflexionar y a recapacitar, porque el bien o mal que hacemos tarde o temprano se regresa, como dice el dicho, se cosecha lo que se siembra, no desaproveches los días del libro de tu vida, descubrirás que Dios te lo recompensará al 1000 por uno. No desperdicies tu vida en rencores, libérate de la apatía, libérate del odio, porque esos sentimientos no dañan a nadie más que a uno mismo, aprende a perdonar, regocíjate en la alegría de la benevolencia, de la bondad, no olvides que amar a quien nos ama, es algo maravilloso, pero lo que resulta aun más grandioso, lo que nos llena aun mas de gracia es perdonar y amar a quien no nos ama, esa es una gracia que solo el Espíritu de Dios nos puede conceder cuando en verdad nos esforzamos por seguir el camino de la verdad, el camino de Dios. Seamos misericordiosos, hoy puede ser el primer día de muchos buenos días. HOY ES TU MEJOR DIA. Que Dios sea tu guía, y te conceda siempre lo necesario para seguir escribiendo tu libro, hasta el día en el que El te llame a su presencia. DIOS TE BENDIGA.

Pídeme que te ame, y te amo,

Pídeme que te olvide, y te olvido,

No me pidas que te odie, …porque no se odiar…

Solo puedo amar y perdonar.

Perdona y ama, y

serás amado y perdonado.

El amor es paciente, es servicial; el amor no es envidioso, no hace alarde, no se envanece, no procede con bajeza, no busca su propio interés, no se irrita, no tiene en cuenta el mal recibido, no se alegra de la injusticia, sino que se regocija con la verdad.

El amor todo lo disculpa, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.

El amor no pasará jamás. COR. 13, 4-8