*Rechazo a reforma penal
*Llevaría a Estado policíaco
*Llevaría a Estado policíaco
Septiembre 26, 2011
Felipe Calderón
Más que para combatir la impunidad y garantizarle a los ciudadanos una justicia pronta y expedita, que sexenio tras sexenio no sólo es incumplida sino revertida y aplicada a inocentes, como sobradamente se ha visto, esa iniciativa que el presidente Felipe Calderón envió el jueves pasado a la Cámara de Diputados en la que propone un nuevo Código Federal de Procedimientos Penales parece tender a la instauración en México de un Estado policíaco, legalizar las arbitrariedades y las violaciones a los derechos humanos hoy imperante y parece ser un preámbulo para el inicio de una nueva guerra pero ahora no contra aquellos flagelos que siguen actuando a placer, sino contra la sociedad civil.
La reacción de los grupos parlamentarios de los partidos políticos en San Lázaro, a excepción del PAN, fue tan inmediata como airada y de rechazo a esa propuesta porque en opinión de legisladores de la oposición propiciaría mayores acciones represivas en el marco de la antinarco emprendida a principios de este sexenio, en la que las fuerzas armadas han incurrido en excesos, como lo revelan las innumerables denuncias presentadas ante las Comisiones de los Derechos Humanos, nacional y estatales, por parte de familiares de detenidos y desaparecidos.
Diputados y senadores del PRI y del PRD, al igual que del PT, coincidieron en que esa iniciativa propone, más que proteger, vulnerar las garantías constitucionales; la tildan, de plano, en tener un “corte fascista” y anticiparon que no la avalarán cuando sea puesta a discusión en comisiones a la que fue turnada ni ante el pleno.
Entre otros, el Ejecutivo Federal propone detenciones “en caso de urgencia”, cateos domiciliarios no por orden judicial sino en base a denuncias anónimas, intervenciones telefónicas de particulares –lo que existe ilegalmente de tiempo atrás- que tendrían carácter legal y llevaría a la criminalización de disidentes políticos y sociales, lo que senadores como Francisco Labastida, del PRI, y su colega Tomás Torres Mercado, del PRD, así como los diputados Alejandro Encinas y Mauricio Toledo, califican de inadmisible.
Con ello se pretende darle justificación legal a los excesos y arbitrariedades policíacas y militares, que en aras de operativos contra los capos y sicarios de los cárteles de la droga han proliferado en este sexenio.
No es la primera ocasión, aunque sí puede ser la última dados los 13 meses que le quedan de mandato, que el presidente Calderón intenta de esa manera vulnerar más las garantías individuales consagradas en la Constitución, cuyo articulado en otras partes ha venido siendo violado de manera reiterada en lo que va del sexenio, a pesar de que el 1 de diciembre de 2006, aquel protestó respetarla, al igual que las leyes que de ella emanen.
Ha sido reiterado el intento presidencial, con el pretexto de combatir al crimen organizado y al narcotráfico, convertir a México en “un país de soplones”, alentando las denuncias anónimas que han propiciado la irrupción domiciliaria de efectivos policías y del Ejército y la Armada, con las consecuentes arbitrariedades que dañan a familias inocentes, ajenas a la comisión de ilícito alguno.
La reacción de los grupos parlamentarios de los partidos políticos en San Lázaro, a excepción del PAN, fue tan inmediata como airada y de rechazo a esa propuesta porque en opinión de legisladores de la oposición propiciaría mayores acciones represivas en el marco de la antinarco emprendida a principios de este sexenio, en la que las fuerzas armadas han incurrido en excesos, como lo revelan las innumerables denuncias presentadas ante las Comisiones de los Derechos Humanos, nacional y estatales, por parte de familiares de detenidos y desaparecidos.
Diputados y senadores del PRI y del PRD, al igual que del PT, coincidieron en que esa iniciativa propone, más que proteger, vulnerar las garantías constitucionales; la tildan, de plano, en tener un “corte fascista” y anticiparon que no la avalarán cuando sea puesta a discusión en comisiones a la que fue turnada ni ante el pleno.
Entre otros, el Ejecutivo Federal propone detenciones “en caso de urgencia”, cateos domiciliarios no por orden judicial sino en base a denuncias anónimas, intervenciones telefónicas de particulares –lo que existe ilegalmente de tiempo atrás- que tendrían carácter legal y llevaría a la criminalización de disidentes políticos y sociales, lo que senadores como Francisco Labastida, del PRI, y su colega Tomás Torres Mercado, del PRD, así como los diputados Alejandro Encinas y Mauricio Toledo, califican de inadmisible.
Con ello se pretende darle justificación legal a los excesos y arbitrariedades policíacas y militares, que en aras de operativos contra los capos y sicarios de los cárteles de la droga han proliferado en este sexenio.
No es la primera ocasión, aunque sí puede ser la última dados los 13 meses que le quedan de mandato, que el presidente Calderón intenta de esa manera vulnerar más las garantías individuales consagradas en la Constitución, cuyo articulado en otras partes ha venido siendo violado de manera reiterada en lo que va del sexenio, a pesar de que el 1 de diciembre de 2006, aquel protestó respetarla, al igual que las leyes que de ella emanen.
Ha sido reiterado el intento presidencial, con el pretexto de combatir al crimen organizado y al narcotráfico, convertir a México en “un país de soplones”, alentando las denuncias anónimas que han propiciado la irrupción domiciliaria de efectivos policías y del Ejército y la Armada, con las consecuentes arbitrariedades que dañan a familias inocentes, ajenas a la comisión de ilícito alguno.
Francisco Labastida
Uno de los ejemplos más recientes de ello, como son los de centenares, quizá miles más, que han ocurrido en el interior de la República, fue el caso del poeta Efraín Bartolomé y de su esposa, la arqueóloga Guadalupe Belmonte, en la colonia Héroes de Padierna en la delegación Tlalpan, de la ciudad de México, y de familias vecinas que, impotentes y entre insultos, amenazas y bajezas policiacas, vieron la manera violenta en que sus hogares eran destrozados en la búsqueda del jefe del grupo criminal “La Mano con Ojos” que sigue operando en el estado de México, a cuya corporación pertenecían quienes portaban chalecos de la ex Policía Federal Preventiva y se cubrían los rostros con pasamontañas para no ser reconocidos.
Eso es, en buena parte, lo que originaría la iniciativa de nuevo Código Federal de Procedimientos Penales del presidente Calderón y que si bien tiene algunos avances para la aplicación de la justicia de acuerdo a la opinión de legisladores y juristas, tiene como propósito la instauración de un Estado policíaco que, aunado a la militarización que hay de varias entidades federativas asoladas por la violencia del crimen organizado y el narcotráfico y las próximas elecciones federales, tendría consecuencias impredecibles pero imaginables para quienes vivimos en este país.
De esto y de aquello…La reunión del Consejo Nacional del PAN fue convertido en muro de lamentaciones en el que el presidente Felipe Calderón y el de ese partido, Gustavo Madero, expiaron sus culpas por la situación en que hoy se encuentra su partido de cara a la elección presidencial y de senadores y diputados que habrá el año próximo… Ambos reconocieron desgaste por el ejercicio de gobierno, incumplimientos, falta de ética, tibieza, tolerancia, actos de deshonestidad de algunos de sus militantes que los llevaron a derrotas electorales y a pérdida de confianza y credibilidad ciudadanas… Llamó el Ejecutivo Federal a los consejeros nacionales a llevar a cabo una “urgente renovación ética” tras reconocer que ese partido ha sufrido un enorme desgaste por el ejercicio de gobierno y un descenso en la percepción de honestidad, en lo que llamó un “renovarse o morir”… También dijo que es urgente reconstruir las convicciones y reglas de comportamiento público y personal de sus militantes que les permitan seguir conservando y acrecentando una superioridad ética y moral que le permitió a su partido no sólo sobrevivir sino ganarle al autoritarismo… Reiteró que es preocupante ante la coyuntura electoral que se avecina la falta de claridad en esa identidad y en el cumplimiento de los principios, por lo que instó a los panistas a reposicionar a su partido como la mejor opción política… Luego de convocar a la unidad del panismo, advirtió, en un mensaje con destinatarios, que ante la dimensión del reto próximo que tiene Acción Nacional “todavía haya algunas estrecheces de miras que minan precisamente esa unidad entre nosotros”… Al final de su mensaje, el presidente Calderón ofreció algo a los consejeros que muchos de ellos dudan que vaya a cumplir, dada la preferencia y apoyo que ha brindado a su ex secretario de Hacienda, Ernesto Cordero… Que no interferirá en la contienda interna en la que elegirán al candidato presidencial a sucederlo, que será respetuoso de la libertad y preferencia de todos y que “ni remotamente haré a otros, lo que quizá algunos pretendieron hacer conmigo”…
Eso es, en buena parte, lo que originaría la iniciativa de nuevo Código Federal de Procedimientos Penales del presidente Calderón y que si bien tiene algunos avances para la aplicación de la justicia de acuerdo a la opinión de legisladores y juristas, tiene como propósito la instauración de un Estado policíaco que, aunado a la militarización que hay de varias entidades federativas asoladas por la violencia del crimen organizado y el narcotráfico y las próximas elecciones federales, tendría consecuencias impredecibles pero imaginables para quienes vivimos en este país.
De esto y de aquello…La reunión del Consejo Nacional del PAN fue convertido en muro de lamentaciones en el que el presidente Felipe Calderón y el de ese partido, Gustavo Madero, expiaron sus culpas por la situación en que hoy se encuentra su partido de cara a la elección presidencial y de senadores y diputados que habrá el año próximo… Ambos reconocieron desgaste por el ejercicio de gobierno, incumplimientos, falta de ética, tibieza, tolerancia, actos de deshonestidad de algunos de sus militantes que los llevaron a derrotas electorales y a pérdida de confianza y credibilidad ciudadanas… Llamó el Ejecutivo Federal a los consejeros nacionales a llevar a cabo una “urgente renovación ética” tras reconocer que ese partido ha sufrido un enorme desgaste por el ejercicio de gobierno y un descenso en la percepción de honestidad, en lo que llamó un “renovarse o morir”… También dijo que es urgente reconstruir las convicciones y reglas de comportamiento público y personal de sus militantes que les permitan seguir conservando y acrecentando una superioridad ética y moral que le permitió a su partido no sólo sobrevivir sino ganarle al autoritarismo… Reiteró que es preocupante ante la coyuntura electoral que se avecina la falta de claridad en esa identidad y en el cumplimiento de los principios, por lo que instó a los panistas a reposicionar a su partido como la mejor opción política… Luego de convocar a la unidad del panismo, advirtió, en un mensaje con destinatarios, que ante la dimensión del reto próximo que tiene Acción Nacional “todavía haya algunas estrecheces de miras que minan precisamente esa unidad entre nosotros”… Al final de su mensaje, el presidente Calderón ofreció algo a los consejeros que muchos de ellos dudan que vaya a cumplir, dada la preferencia y apoyo que ha brindado a su ex secretario de Hacienda, Ernesto Cordero… Que no interferirá en la contienda interna en la que elegirán al candidato presidencial a sucederlo, que será respetuoso de la libertad y preferencia de todos y que “ni remotamente haré a otros, lo que quizá algunos pretendieron hacer conmigo”…
Gustavo Madero
En su intervención y sin mencionar por su nombre al presidente municipal panista de Monterrey, Fernando Larrazabal, que ignoró la petición del comité ejecutivo nacional a que se separara del cargo mientras duran las investigaciones en las que su hermano Jonás está involucrado, también le entró a la autocrítica… Reconoció que “en ocasiones, hemos sido tibios y tolerantes ante comportamientos particulares de algunos miembros y funcionarios que han caido en actos de corrupción”… Pareció anunciar la inminente acción partidista contra el edil regio al advertir que “hay que actuar con mayor determinación en el ejercicio ético de la política y que “es hora de deslindarnos con oportunidad y contundencia de cualquier comportamiento indigno de los principios y valores que defiende nuestro partido”… No dudó Madero en reconocer que en el PAN “hemos pervertido procesos de afiliación y de elección de candidatos a puestos de elección popular y en la integración de los órganos directivos del partido que nos han llevado a lamentables fallas y equivocaciones ante la ciudadanía”… Por cierto que a pesar de que los allegados al favorito de Los Pinos solicitaron, y lograron, que sin ser miembro del Consejo Nacional, Cordero estuviera en ese evento al que por ellos serlo, acudieron Josefina Vázquez Mota y Santiago Creel, no apareció en la sede blanquiazul… Por otra parte, el mismo sábado, Enrique Peña Nieto, ex gobernador priísta del estado de México, acudió al informe del senador saltimbanqui René Arce, ex perredista, efímero priísta y hoy pevemista, en la explanada del Monumento a la Revolución… Ahí, el más aventajado de los aspirantes presidenciales expresó públicamente su apoyo a Beatriz Paredes para que sea la priísta que rescate el Gobierno del Distrito Federal que desde 1997 está en manos del PRD… También ese día, sin ser ya presidente del PVEM, Jorge Emilio González, le ofreció a Peña Nieto el apoyo de ese partido… Y como sus asesores le insisten en que a diario se lance contra el político mexiquense, Ernesto Cordero declaró que “PRI y PVEM son lo mismo”, descalificando el apoyo pevemista… Como otras muchas cosas de la política, el ex secretario de Hacienda ignora que los puntos porcentuales que obtendría el tricolor, de ser Peña Nieto el abanderado de su partido, podrían marcar la ventaja que el presidente Calderón hubiera deseado tener en 2006, cuando obtuvo apenas el 0.56 por ciento sobre Andrés Manuel López Obrador… Muerta, como se temía, apareció la joven bachiller xalapeña Gabriela Arlene Benítez Ybarra, de 17 años, que fue secuestrada en la capital de Veracruz el 13 de junio pasado, lo que viene a ser otro severo revés al gobernador priísta de ese estado, Javier Duarte que insiste en negar que haya violencia…
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