ARTICULISTA INVITADO
Este viernes, los candidatos y candidatas que aspiramos a la diputación federal, la senaduría y la Presidencia de la República, hemos comenzado la marcha hacia aquella meta que todos los mexicanos queremos por igual: un Nuevo Rumbo para México.
Ya comienza el final de una época marcada por la violencia, la muerte, el hambre y la intolerancia. Cada vez está más cerca el día en el que los mexicanos saldremos a las urnas a decir: Basta del mal gobierno, basta de enfrentamientos, basta de miedo.
Viene ahora la etapa de presentar una alternativa, de poner las propuestas y los compromisos sobre la mesa, de ir con la gente y ponernos a su servicio, de dar nuestra palabra de honor y empeñar nuestro esfuerzo constante.
La meta es llegar a las cámaras para comenzar a trabajar cuanto antes, dejar atrás toda la división y los prejuicios que impidieron que en estos doce años el país pudiera llevar a cabo las Reformas Estructurales que tanto necesita.
Y sin duda, las esperanzas de todos los candidatos y candidatas del PRI, están depositadas en el liderazgo y el compromiso de nuestro candidato a la Presidencia de la República, Enrique Peña Nieto.
Él es hombre capaz y decidido que va a traer a este país la paz y la tranquilidad de antaño. Es un priísta joven y con ideas frescas, pero con la herencia histórica de nuestro gran partido, que gobernó México en sus mejores etapas de crecimiento y bonanza, el partido que ayudó y guió a los mexicanos en la construcción de todas las instituciones de las que hoy gozamos.
Enrique Peña Nieto comenzó su campaña con la fuerza del compromiso, firmando sus promesas ante notario para darles mayor firmeza, y ofreciéndose en cuerpo y alma a los mexicanos para así, en unión, transformar a nuestro país en un lugar donde realmente se viva mejor.
Son cinco sus compromisos: Recuperar la paz y libertad a todos los mexicanos; Alcanzar un México incluyente y sin pobreza; Procurar más educación y de calidad para todos los mexicanos; Hacer crecer al país para generar más y mejores empleos para todos los mexicanos; recuperar el liderazgo y orgullo de México en el exterior.
Él se ha comprometido con los niños, nuestros niños que viven con miedo, que ya no pueden salir a las calles a jugar como antes. Se comprometió con los hombres y las mujeres trabajadores, para darles mayores oportunidades de empleo y desarrollo, con los jóvenes y con los adultos mayores, con los empresarios y los agricultores, con los comerciantes y los artistas. Con todo ese México que está pidiendo salir del caos en que se encuentra, de la pobreza en que vive.
Enrique Peña Nieto nos pregunta si queremos cambiar a México, y la respuesta que todos le damos es: SÍ. Es nuestro mayor anhelo, ver una vez más la vida con buenos ojos, poder crecer y progresar, volver a confiar en que quienes nos representan están haciendo las cosas bien. No importa nuestra ideología, es momento de unirnos, de ponerle un alto al desorden y darnos la mano desde todos los puntos del país para que las cosas cambien.
Nuestra meta es que desde el Senado de la República, podamos apoyar estas grandes reformas que propone Peña Nieto, porque es necesario el apoyo del Poder Legislativo para hacerlas realidad. Nuestro proyecto es sumarnos con el próximo Presidente de México a esa gran tarea de llevar a México por un nuevo rumbo.
Por eso ofrecemos nuestro compromiso y pedimos la confianza del voto ciudadano, una confianza que no defraudaremos y que aprovecharemos en beneficio de todos.
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