CAMALEON

La Calle

Jue, 26/05/2011 -
Por: Alfredo Bielma Villanueva
Cuan curiosa es la actitud del individuo con poder lo pudiera confirmar el hecho de que  el mismo sujeto que sin autoridad se muestra solícito para con sus conciudadanos de improviso, al obtener el solio del poder se transforma, sufre una metamorfosis que lo hace irreconocible e inexplicable respecto de su condición anterior, una mutación que sin embargo es transitoria pues solo perdura lo que dicta la norma jurídica al establecer los plazos del mandato. Débese aclarar que este es un fenómeno reiterado en sociedades con subdesarrollo político, un estadio del que en México no estamos muy lejos.

En todo régimen de gobierno democrático son las instituciones las que permiten que el poder se trasmita de manera pacífica y que los eventuales encargados de su operación puedan disponer de la autoridad a ellas atribuidas con el propósito de conseguir el bienestar general de la sociedad a la que deben su posición de poder. Esto es al menos lo que la filosofía política dice, aunque muy otra puede ser la realidad en la que cotidianamente encontramos palpables constancias de lo contrario.

Lo anterior lo podemos constatar con meridiana claridad en el mini universo xalapeño, en donde hoy mismo observamos la repetida petición que un nutrido grupo de vecinos ha hecho ante instancias municipales para que resuelvan el caso de una calle que está vedada al tránsito de personas y de vehículos por representar un peligro para su seguridad. El caso inicia cuando la constructora “Helu” fue autorizada para construir en la esquina que hacen las calles Araucarias y Pico de Orizaba; al escarbar para cimentar sin seguir las precauciones del caso socavó los linderos de la calle ocasionando que ya sin sustento debajo, con las lluvias y el peso vehicular, el pavimento se hunde y en consecuencia haya serio peligro de derrumbe. El problema va en vías de complicarse porque un tramo de la avenida Araucarias también está socavándose, con el consiguiente riesgo para quienes por allí circulan.

Los vecinos del lugar, afectados por el cierre de la calle Pico de Orizaba, han tocado diversas puertas, las del diputado Ricardo Ahued se les abrieron y fueron escuchados por el legislador, quien ofreció intervenir sin demérito de lo que determine hacer la autoridad municipal en lo que le corresponde.

Muy participativos en la intención de resolver este asunto, solicitaron audiencia con la alcaldesa de Xalapa con el propósito de buscarle solución al problema pero, como ellos lo han divulgado, los “chamaquearon”, porque después de variarles en más de una ocasión la hora fijada para ser atendidos no fueron recibidos por la alcaldesa sino por otro servidor público. No es que se minimice la intervención del funcionario pero viene a reflexión la pregunta ¿qué puede ser más importante para una autoridad municipal que atender a los vecinos del lugar que gobierna? La pregunta viene al caso porque es lugar común la actitud más que solícita que adoptan en tiempos electorales quienes aspiran a un cargo de elección popular con el argumento de servir a la sociedad, pero, como ocurre con frecuencia, cuando están revestidos de atribuciones y deberes para atender los problemas citadinos, simplemente escurren el bulto.

Debe asentarse que la comisión de vecinos no acudió a las oficinas municipales a su entero arbitrio, sino que previamente se les fijo día y hora en la agenda municipal para ser atendidos. En el ir y venir del cambio de hora para la que sería una cita frustrada varios funcionarios los atendieron solo para acordar que este jueves 26 a las 17 horas se presentarán al lugar de los hechos, en Araucarias esquina con Pico de Orizaba, para revisar el caso. Pero ya priva el desaliento ante la soterrada sugerencia que se les hizo para que los vecinos “demanden al señor Hakim” de modo de “hacerle presión” para que repare el daño; como si esto fuera un asunto que ellos tuvieran que resolver por sí solos y no materia de obligación del órgano público.

Tómese en cuenta que los vecinos no acudieron a un interlocutor en lo particular, sino a quien por ahora ostenta el cargo de primer edil, que en este caso es Elizabet Morales; buscaron a quien tiene la autoridad por delegación expresa de la voluntad ciudadana, a la que le otorgaron su confianza y revistieron de legitimidad para actuar a su favor (de la colectividad, se entiende). Por ello, ahora le reconocen obediencia a su mandato y este es acatado por respeto a la institución que representa, porque la gente obedece al principio de autoridad indistintamente de la persona que eventualmente lo desempeña. Luego entonces, quien sea que esté en la responsabilidad pública de una alcaldía tiene la ineludible obligación de atender a sus mandantes.

O, ¿Acaso será necesario bloquear y tomar una calle para manifestarse frente al palacio municipal trastornando el tránsito vehicular para ser escuchados?

Hubo una vez en este país una dramática coincidencia entre lo acontecido en otras partes del planeta con lo posteriormente sucedido aquí. Fue en 1968, cuando la caliente primavera europea de mayo trajo consigo choques violentos en París y, coincidencia o no, aquí en México en el otoño se produjo un desenlace fatal cuando jóvenes estudiantes fueron violentamente reprimidos después de realizar movilizaciones masivas enarbolando protestas y exigencias. El año 2011 inició con violencia en Túnez, siguió Egipto, después Libia y a continuación se han manifestado protestas ciudadanas y juveniles en Madrid, que por lo pronto ya repercutieron desfavorablemente en el resultado electoral para el partido en el poder, el PSOE. Sobre este particular dice el rector de la UNAM: "El movimiento de protesta realizado por los jóvenes en España, expresa el hartazgo, la desesperación y la falta de expectativas reales en el futuro; es un mensaje de alerta que debe ser entendido por nuestra sociedad, que también tiene ese problema. México y el mundo tienen hoy problemas serios, crónicos; dan muestra, en sus sistemas de desarrollo, de un franco agotamiento, incluso de enfermedad”.

 ¿Será que no aprendemos que cuando la hojarasca está seca una pequeña chispa  puede provocar un incendio?

alfredobielmav@hotmail.com