Fortin Municipio que Florece!!!

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martes, 22 de noviembre de 2011

EL BERLUSCONI DE FORTIN Por: Gilberto Haaz Diez

Acertijos
*Hay puñales en las sonrisas de los hombres; cuanto más cercanos son, más sangrientos. William Shakespeare (1564-1616) Escritor británico. Camelot.
EL BERLUSCONI DE FORTIN
Mientras las dos ciudades vecinas, Orizaba y Córdoba, trabajan su obra pública y la orizabeña fue distinguida con el premio “Gobierno y Gestión local 2011”, que da el Centro de Investigación y Docencia Económica (CIDE), en Fortín el municipio languidece. Mientras en Orizaba las finanzas andan bien y se adelantan los aguinaldos, en Fortín de las Flores, antiguo feudo de tranquilidad del patriarca Antonio Ruiz Galindo, su alcalde Cesar Torrecillas salió endeudador. Leo en el periódico cordobés, ‘El Buen Tono’, uno que resurgió de sus cenizas, que éste frívolo alcalde con la autorización del Congreso, que a veces es como el Orfis, no sirve para nada, le autorizaron pedir deuda a Banorte de 45 millones de pesos, misma que no pagará y dejará a su sucesor, y luego se espantan cuando pierden elecciones. Otra, la Marina puso orden en esa casa descuidada. Aún más: tirotearon el Palacio y la policía arremetió en contra de los funcionarios municipales que llegaban al recinto, al tesorero municipal y al secretario del Ayuntamiento los trataron como Márquez a Pacquiao, a chingadazo puro. El día del desfile del 20 de noviembre, muchos contingentes cancelaron su participación. El horno no está para bollos. Se habla de ingobernabilidad y se escuchan rumores y se valora que el suplente va a arribar a terminar ese trienio chafa, o un Concejo Municipal. Cuidado, no vayan a salir con malos resultados a Peña Nieto, porque eso se cobra, y muy caro y con réditos y con intereses altos. Fortín está para llorar, y el Orfis, bien gracias. Y Gobernación del Buga, por ahí.

MUERTE DE KENNEDY
Hoy, 22 de noviembre, se cumple un aniversario de la muerte de Kennedy (1963, Dallas, Texas). En julio de este año anduve por Dallas, Texas. Fui al sitio donde a fuego cruzado lo cazaron como se caza al venado en cacería. Una conjura desde el mismo poder. Va el relato: “El calor pega durísimo. 42 grados, suda hasta aquellito. El Congierge nos había dicho cómo llegar a ese cruce de las calles Elm y Houston, estoy a minutos de ese sitio que juré algún día visitar. Todos nos acordamos dónde y en qué sitio estábamos cuando escuchamos la noticia de la muerte de Kennedy. El tranvía nos deja a escasas cinco cuadras. El calor pega. Caminamos hacia la Plaza Dealey, escenario de aquella batalla de montoneros. Cuando sorprendieron al mundo y al mismo Servicio Secreto, al que le mataron a su Comandante en Jefe. Llego al parque. Veo el edificio de librería, el Texas School Book, que hoy sirve de Museo donde exhiben asuntos de ese día. Hay gente en la plaza. Todos se toman las fotos. Comienzo yo las mías. Fijo los sitios dónde dicen había los tres tiradores, el almacén ya muy famoso, donde según esto Oswald lo hizo todo solito. La barda de madera, donde le pegaron el tiro de frente, que hizo que el film de Zapruder pasara a la inmortalidad al captar cómo la cabeza del presidente se va hacia atrás, producto del impacto de la bala, y el otro edificio aledaño, veo también el puente de la autopista donde, dicen estaba un cuarto tirador, por si fallaban los otros.

EL CAMPOSANTO
Este lugar es un camposanto que ha sido catalogado como Monumento Nacional, por lo que representó en la historia de las tragedias, y que ese día avergonzó a Dallas y a los texanos, aunque en realidad los que orquestaron su muerte fueron los capos de Washington (léase el último libro, ‘La Conspiración’, escrito por David Talbot, un amigo y colaborador de Bobby Kennedy, la versión más acercada a la realidad y que salió a la venta hace apenas un par de años, al igual que ‘La Muerte del Presidente’, de William Manchester, libro viejo de encargo de la familia, dos libros señeros).

EL FILM DE ZAPRUDER
Me quedo una media hora viendo el letrero que atajó un poco la filmación de Zapruder. Todo sigue igual, en el cemento hay dos equis, que marcan el sitio donde las balas le pegaban al presidente en la cabeza y el cuello. Era un estadista, sus discursos aún están vigentes. Dejo el sitio y atravieso la calle. Voy al sexto piso de lo que ahora es un Museo, allí donde Oswald fijó aquel rifle, quién sabe por encargo de quien, aunque la CIA, FBI, Pentágono, Militares, Mafia y capos de las empresas del petróleo y el acero, se conjuraron para dar un golpe de estado, que pondría a un presidente dócil, un vaquero como Fox que llevó como lápida haber sucedido así a ese presidente tan amado como Lincoln. Una empleada me vende el tiquet de entrada. Cuesta 13.50 dólares. Tomo un audiovideo en español, esos aparatitos que te van llevando por todos los sitios donde las fotos están amuradas. No le hago mucho caso, he leído tanto de Kennedy que yo mismo podría ser guía. Las fotos con Jackeline en aquel paseo de gloria en Nueva York, en campaña. La famosísima foto cuando se nombró un berlinés en Berlín, donde lloraban los alemanes al oírlo. La del día del crimen. Jackeline, cuando el impostor Johnson toma protesta y ella, con ese rostro y en shock, llora en silencio con el vestido aún manchado de la sangre presidencial.

CON EL VIENTO EN CONTRA
Hay elecciones que marcan. El domingo pasado la derecha logró recuperar el poder en la España moderna. La que ahora vive una crisis del ladrillo (así le llamaron al crack de las viviendas). Estaba muy cantado el triunfo. Dos muy conocidos españoles reñían en ese ring. Felipe González, que apoyaba a Rubalcaba, el perdedor, y José María Aznar, manager de Rajoy, el barbón ganador, con quien aparece en la foto histórica del pódium de vencedores. José Luis Rodríguez Zapatero se va por la puerta de atrás, la de la cocina. Sabía que el destino y la crisis lo llevaban a entregar el poder. “Acudíamos a estas elecciones con todo el viento en contra”, dijo todo agüitado y compungido y achicopalado. Nuevos vientos llegan a España. La derecha tendrá que capotear con la crisis y llegar ante la Canciller Merkel a rendirle la plaza y pedirle lana en abonos chiquitos. El periódico Le Monde de París, le pregunta: ¿Adónde vas, España?. Seguro que a vencer a la crisis. Ni lo duden, aunque les demore unos años.
Comentarios: haazgilberto@hotmail.com

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