*Vázquez Mota en el blanco
*Buscarán tumbarla en el debate
María Elena Orantes
Si ni con las andanadas que seguramente le enderezarán cuestionándola como lo han hecho hasta ahora, logran restarle algunos puntos de ventaja a Josefina Vázquez Mota en el debate que sostendrán hoy en la sede del PAN, Santiago Creel y Ernesto Cordero tendrán que conformarse, y admitir, que eso la ubicará con mayores posibilidades de ganar la candidatura presidencial de ese partido.
El blanquiazul ha perdido un tiempo valioso frente al priista Enrique Peña Nieto y el perredista Andrés Manuel López Obrador, que llevan varias semanas -de éste año y del anterior- recorriendo el país en busca de apoyo y votos entre los militantes de sus partidos, que difícilmente podrán recuperar de cara a la elección del primer domingo de julio venidero.
Eso, sin embargo, en lo que va de la contienda interna panista, no parece preocuparle a la dirigencia nacional que encabeza Gustavo Madero, ni tampoco a quienes le disputarán la postulación a la que fuera coordinadora del grupo parlamentaria de Acción Nacional en la Cámara de Diputados.
Más aún, en otra muestra de ingenuidad política, José Espina, presidente de la Comisión Nacional de Elecciones, anunció ayer haber pactado con lo representantes de los tres precandidatos “cuidar la imagen del partido” -como si fuera algo que verdaderamente les preocupara- y evitar todo tipo de descalificaciones en el debate que habrá y que la moderadora será Adriana Pérez Cañedo, conductora de noticiarios del Canal 11 y con experiencia en ese tipo de eventos.
De qué manera, si no es arremetiendo en contra de ella, como Creel y, principalmente Cordero, podrían ganarle terreno a Vázquez Mota, que, digan lo que digan, no es bien vista por ambos, y menos por éste, ni mucho menos en Los Pinos, y a lo largo de los meses no han sabido de qué manera acortar la ventaja que les lleva, por más intentos que han hecho, incluida la “guerra sucia” que han emprendido en su contra.
A pesar de eso, la ex secretaria de Educación Pública y de Desarrollo Social ha encabezado de manera permanente las encuestas de opinión y ninguno de sus opositores ha logrado siquiera acercársele en lo que va del proceso interno en el PAN: ni Creel ha pasado nunca del segundo lugar, ni mucho menos Cordero del tercero.
El blanquiazul ha perdido un tiempo valioso frente al priista Enrique Peña Nieto y el perredista Andrés Manuel López Obrador, que llevan varias semanas -de éste año y del anterior- recorriendo el país en busca de apoyo y votos entre los militantes de sus partidos, que difícilmente podrán recuperar de cara a la elección del primer domingo de julio venidero.
Eso, sin embargo, en lo que va de la contienda interna panista, no parece preocuparle a la dirigencia nacional que encabeza Gustavo Madero, ni tampoco a quienes le disputarán la postulación a la que fuera coordinadora del grupo parlamentaria de Acción Nacional en la Cámara de Diputados.
Más aún, en otra muestra de ingenuidad política, José Espina, presidente de la Comisión Nacional de Elecciones, anunció ayer haber pactado con lo representantes de los tres precandidatos “cuidar la imagen del partido” -como si fuera algo que verdaderamente les preocupara- y evitar todo tipo de descalificaciones en el debate que habrá y que la moderadora será Adriana Pérez Cañedo, conductora de noticiarios del Canal 11 y con experiencia en ese tipo de eventos.
De qué manera, si no es arremetiendo en contra de ella, como Creel y, principalmente Cordero, podrían ganarle terreno a Vázquez Mota, que, digan lo que digan, no es bien vista por ambos, y menos por éste, ni mucho menos en Los Pinos, y a lo largo de los meses no han sabido de qué manera acortar la ventaja que les lleva, por más intentos que han hecho, incluida la “guerra sucia” que han emprendido en su contra.
A pesar de eso, la ex secretaria de Educación Pública y de Desarrollo Social ha encabezado de manera permanente las encuestas de opinión y ninguno de sus opositores ha logrado siquiera acercársele en lo que va del proceso interno en el PAN: ni Creel ha pasado nunca del segundo lugar, ni mucho menos Cordero del tercero.
Monte Alejandro Rubido García
La de hoy podría ser la última oportunidad que tendrán éstos para tratar de mejorar sus posiciones. De no lograrlo, tendrán que conformarse con que Vázquez Mota quede lista para alcanzar el triunfo el domingo 5 de febrero en una de las dos vueltas de votación que están previstas, en caso de que en la primera uno de los tres obtenga el 37 por ciento de la votación con una ventaja de cinco por ciento sobre los otros dos.
Más que compañera de partido, ella es vista por sus adversarios panistas, sobre todo por el ex secretario de Hacienda, peor que si fuera enemiga, a la que no sólo hay que combatir a toda costa para cerrarle el paso sino impedirle que pueda alcanzar los votos necesarios para ser postulada.
A eso se han dedicado muchos en las filas de Acción Nacional, en vez de reconocerla como la precandidata con más visos de abanderar al blanquiazul y aceptar que es la más competitiva para lo que vendrá.
En Los Pinos no la ven así, ni tampoco Cordero, que en cuanta ocasión tiene, le endereza críticas y cuestionamientos que en vez de debilitarla, la han fortalecido, esperanzados como está en la residencia oficial y en la casa de campaña de éste en que los votos de militantes y adherentes, el domingo 5 de febrero, acabarán por favorecerlo.
Por más exhortos a la cordura, a la civilidad y a no caer en enfrentamientos y descalificaciones que ha hecho la dirigencia del PAN a los precandidatos, francamente no se ve cómo podrán evitarlos quienes saben y están conscientes en que solamente echando mano de unos y otras, podrían restarle puntos a quien los ha aventajado durante meses.
El “dedazo presidencial” estilo priísta que tanto criticaran en el blanquiazul, estará a prueba en el debate de hoy y, por supuesto, el día de la elección interna.
De consumarse, el camino de regreso del tricolor a la Presidencia de la República podrían allanarlo, los mismos que hace 12 años los despojaron de ella.
De esto y de aquello…
Los acuerdos de coalición que el PRI suscribió con el PVEM y Nueva Alianza para postular candidatos a cargos de elección en algunos estados y que motivaron inconformidad y protestas de los militantes del tricolor, empezaron a tener consecuencias… La senadora María Elena Orantes, que aspiraba a ser candidata a gobernadora de Chiapas, renunció al Institucional por la imposición de su colega Manuel Velasco, del Verde Ecologista, como parte de aquellas coaliciones… Y a pesar de que la dirigencia priísta lamentó la decisión de la legisladora y rechazó su argumento, habría que recordar que el virtual candidato presidencial de ese partido, Enrique Peña Nieto, fue a Chiapas el mes pasado al informe del senador pevemista y ahí anunció que sería el abanderado de la coalición PRI-PVEM a la gubernatura de ese estado… Ante eso, la senadora Orantes expresó su malestar y anticipó que renunciaría a su partido que en aras de las coaliciones, daba la espalda a la militancia y al trabajo partidista… En la reciente gira de Andrés Manuel López Obrador por Chiapas, la hoy ex priísta recibió la invitación de contender por los partidos de izquierda que llegado el momento habrá de postularla… Los priístas chiapanecos se han sumado a las protestas por su desplazamiento partidista y no es remoto que otros sigan el mismo camino que la senadora Orantes no sólo en la entidad del sureste sino en otras del centro y norte del país en las que las candidaturas a cargos de elección serán para el Verde Ecologista o Nueva Alianza… Como se recuerda, esas coaliciones fueron acordadas en negociaciones con dirigentes de esos partidos con el hoy coordinador general de la campaña de Peña Nieto, Luis Videgaray, que tal vez sepa de finanzas pero no de política, como ya lo ha demostrado en anteriores ocasiones en que ha metido en aprietos al mexiquense… Tras darse a conocer el peritaje de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos que responsabiliza a policías ministeriales del gobierno de Guerrero de dos estudiantes normalistas y de que la Procuraduría de Justicia estatal anunció que se ejercitará acción penal contra ellos, sus compañeros reanudaron movilizaciones para exigir justicia…
Más que compañera de partido, ella es vista por sus adversarios panistas, sobre todo por el ex secretario de Hacienda, peor que si fuera enemiga, a la que no sólo hay que combatir a toda costa para cerrarle el paso sino impedirle que pueda alcanzar los votos necesarios para ser postulada.
A eso se han dedicado muchos en las filas de Acción Nacional, en vez de reconocerla como la precandidata con más visos de abanderar al blanquiazul y aceptar que es la más competitiva para lo que vendrá.
En Los Pinos no la ven así, ni tampoco Cordero, que en cuanta ocasión tiene, le endereza críticas y cuestionamientos que en vez de debilitarla, la han fortalecido, esperanzados como está en la residencia oficial y en la casa de campaña de éste en que los votos de militantes y adherentes, el domingo 5 de febrero, acabarán por favorecerlo.
Por más exhortos a la cordura, a la civilidad y a no caer en enfrentamientos y descalificaciones que ha hecho la dirigencia del PAN a los precandidatos, francamente no se ve cómo podrán evitarlos quienes saben y están conscientes en que solamente echando mano de unos y otras, podrían restarle puntos a quien los ha aventajado durante meses.
El “dedazo presidencial” estilo priísta que tanto criticaran en el blanquiazul, estará a prueba en el debate de hoy y, por supuesto, el día de la elección interna.
De consumarse, el camino de regreso del tricolor a la Presidencia de la República podrían allanarlo, los mismos que hace 12 años los despojaron de ella.
De esto y de aquello…
Los acuerdos de coalición que el PRI suscribió con el PVEM y Nueva Alianza para postular candidatos a cargos de elección en algunos estados y que motivaron inconformidad y protestas de los militantes del tricolor, empezaron a tener consecuencias… La senadora María Elena Orantes, que aspiraba a ser candidata a gobernadora de Chiapas, renunció al Institucional por la imposición de su colega Manuel Velasco, del Verde Ecologista, como parte de aquellas coaliciones… Y a pesar de que la dirigencia priísta lamentó la decisión de la legisladora y rechazó su argumento, habría que recordar que el virtual candidato presidencial de ese partido, Enrique Peña Nieto, fue a Chiapas el mes pasado al informe del senador pevemista y ahí anunció que sería el abanderado de la coalición PRI-PVEM a la gubernatura de ese estado… Ante eso, la senadora Orantes expresó su malestar y anticipó que renunciaría a su partido que en aras de las coaliciones, daba la espalda a la militancia y al trabajo partidista… En la reciente gira de Andrés Manuel López Obrador por Chiapas, la hoy ex priísta recibió la invitación de contender por los partidos de izquierda que llegado el momento habrá de postularla… Los priístas chiapanecos se han sumado a las protestas por su desplazamiento partidista y no es remoto que otros sigan el mismo camino que la senadora Orantes no sólo en la entidad del sureste sino en otras del centro y norte del país en las que las candidaturas a cargos de elección serán para el Verde Ecologista o Nueva Alianza… Como se recuerda, esas coaliciones fueron acordadas en negociaciones con dirigentes de esos partidos con el hoy coordinador general de la campaña de Peña Nieto, Luis Videgaray, que tal vez sepa de finanzas pero no de política, como ya lo ha demostrado en anteriores ocasiones en que ha metido en aprietos al mexiquense… Tras darse a conocer el peritaje de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos que responsabiliza a policías ministeriales del gobierno de Guerrero de dos estudiantes normalistas y de que la Procuraduría de Justicia estatal anunció que se ejercitará acción penal contra ellos, sus compañeros reanudaron movilizaciones para exigir justicia…
Roberto Miranda Sánchez
Por lo menos 300 de ellos se congregaron ayer frente a la residencia oficial del gobernador aliancista Angel Heladio Aguirre en Chilpancingo para exigir castigo a los homicidas de Jorge Alexis Herrera Pino y Gabriel Echeverría de Jesús… Pancartas con leyendas como “Aquí vive el asesino de estudiantes” y “Juicio político al gobernador”, fueron portadas por los normalistas que se plantaron ante la residencia de Aguirre en la que estaba reunido con representantes de las Brigadas Internacionales de Paz de Guerrero… Estos han estado dando seguimiento a la violación de derechos humanos de luchadores sociales en esa entidad que en los últimos meses han sido perseguidos, sometidos a torturas y encarcelados… Monte Alejandro Rubido García, uno de los hombres que más saben de inteligencia en México, fue designado por el secretario de Gobernación, Alejandro Poiré, como nuevo secretario general del Centro de Investigación y Seguridad Nacional, organismo en el que ha trabajado a lo largo de muchos años… Sustituye a Gustavo Mohar, quien ahora se desempeñará como subsecretario de Migración, Población y Asuntos Religiosos de la Segob, cargo en el que estuviera al frente Poiré a mediados de este sexenio… Mohar fue titular de la Dirección General de Asuntos Internacionales del Cisen, negociador para asuntos migratorios de la Secretaría de Relaciones Exteriores con países de Centroamérica… A su vez, Rubido García fue secretario general adjunto , director de Estudios Estratégicos y secretario general del Cisen; secretario técnico del Consejo de Seguridad Nacional, vocero del gobierno federal en materia de seguridad y secretario ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública… Verdaderas carcajadas provocó ese anuncio del presidente del PRI, Pedro Joaquín Coldwell, de que cuando haya pruebas de que precandidatos y candidatos de ese partido están involucrados con la delincuencia organizada o utilicen recursos de procedencia ilícita, se les cancelarán sus registros y serán denunciados penalmente… Bastaría con ver muchos nombres de aspirantes priístas a cargos de elección, a quienes de tiempo atrás se ha vinculado con el narcotráfico, para anticipar que tal medida no pasará de ser más que un buen deseo… Y bastaría también con ver a no pocos de los “invitados especiales” a los actos que encabeza Enrique Peña Nieto en algunas entidades para corroborarlo… Ante el retiro del general Roberto Miranda Sánchez del Ejército, al cumplir 75 años de edad, el presidente Calderón designó como nuevo oficial mayor de la Secretaría de la Defensa Nacional al general de división Salvador Cienfuegos Zepeda, cargo que aquel ocupaba…
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