*Exhibe Elba otra vez a priístas
*Dobla “nomenklatura” a Peña
Elba Esther Gordillo
Elba Esther Gordillo ha vuelto a poner en jaque al PRI no sólo por romper la alianza que la dirigencia de su partido Nueva Alianza suscribiera en noviembre del año pasado para ir en coalición en las elecciones federales del primer domingo de julio, sino por exhibir nuevamente a la vieja guardia tricolor que presionó a su virtual candidato presidencial, Enrique Peña Nieto, hasta con la velada amenaza de generalizarle una rebelión interna, si se cumplía el acuerdo suscrito por el entonces tambaleante presidente de su comité ejecutivo nacional, Humberto Moreira de otorgarle a aquel 24 diputaciones y cuatro senadurías.
Ciertamente, al concretarse esa coalición, en las filas priístas se originaron protestas y un movimiento de inconformidad que en el transcurso de las semanas se fue extendiendo en varias entidades federativas por la “generosidad” del profesor coahuilense con su amiga y protectora, cuando -en pleno escándalo que lo envolvió por la cuantiosa deuda que dejó en su gestión como gobernador de su estado con el uso de documentos falsos, que acabó por obligarlo a renunciar al cargo- se comprometió a darle tal número de candidaturas al partido de la presidenta vitalicia del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación que en 2006 fue expulsada del PRI.
La rebelión interna en la militancia del PRI surgió en Chiapas y Sinaloa, tras de que la profesora chiapaneca convino con Moreira, como parte del acuerdo, que en esos estados, su hija Mónica Arriola y su yerno Fernando González, fueran candidatos de la coalición a senadores.
Militantes chiapanecos y sinaloenses del Institucional emprendieron los reclamos que al paso de las semanas se repitieron y agudizaron por el desplazamiento de quienes con años de trabajo partidista y lealtad a ese partido esperaban la oportunidad de ser postulados para contender por curules y escaños, actitud que fue respaldada por quienes ya fueron gobernadores y legisladores en varias ocasiones, muchos de los cuales se apuntaron para volver a ocupar cargos de elección.
Arguyeron que el desprestigio de la lideresa magisterial que se ha perpetuado en el SNTE, le costaría al PRI más votos de los que podrá alcanzar aliada con el Panal y recordaron machaconamente que ella fue expulsada hace seis años de ese partido por haber traicionado sus estatutos y principios al actuar en su contra, apoyando la candidatura del hoy presidente Felipe Calderón.
A todos los niveles priístas, aun entre miembros del propio comité nacional hasta en los estatales y municipales, se cuestionó la coalición con Nueva Alianza y la pretensión de regalarle tantas candidaturas a ese partido que la eterna dirigente magisterial creó cuando su expulsión del Institucional, era inminente.
Ciertamente, al concretarse esa coalición, en las filas priístas se originaron protestas y un movimiento de inconformidad que en el transcurso de las semanas se fue extendiendo en varias entidades federativas por la “generosidad” del profesor coahuilense con su amiga y protectora, cuando -en pleno escándalo que lo envolvió por la cuantiosa deuda que dejó en su gestión como gobernador de su estado con el uso de documentos falsos, que acabó por obligarlo a renunciar al cargo- se comprometió a darle tal número de candidaturas al partido de la presidenta vitalicia del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación que en 2006 fue expulsada del PRI.
La rebelión interna en la militancia del PRI surgió en Chiapas y Sinaloa, tras de que la profesora chiapaneca convino con Moreira, como parte del acuerdo, que en esos estados, su hija Mónica Arriola y su yerno Fernando González, fueran candidatos de la coalición a senadores.
Militantes chiapanecos y sinaloenses del Institucional emprendieron los reclamos que al paso de las semanas se repitieron y agudizaron por el desplazamiento de quienes con años de trabajo partidista y lealtad a ese partido esperaban la oportunidad de ser postulados para contender por curules y escaños, actitud que fue respaldada por quienes ya fueron gobernadores y legisladores en varias ocasiones, muchos de los cuales se apuntaron para volver a ocupar cargos de elección.
Arguyeron que el desprestigio de la lideresa magisterial que se ha perpetuado en el SNTE, le costaría al PRI más votos de los que podrá alcanzar aliada con el Panal y recordaron machaconamente que ella fue expulsada hace seis años de ese partido por haber traicionado sus estatutos y principios al actuar en su contra, apoyando la candidatura del hoy presidente Felipe Calderón.
A todos los niveles priístas, aun entre miembros del propio comité nacional hasta en los estatales y municipales, se cuestionó la coalición con Nueva Alianza y la pretensión de regalarle tantas candidaturas a ese partido que la eterna dirigente magisterial creó cuando su expulsión del Institucional, era inminente.
Enrique Peña Nieto
Eso por el enfrentamiento personal y político que sostuvo con el entonces presidente de ese partido y después abanderado presidencial en 2006, Roberto Madrazo, al que le advirtió que haría todo lo que estuviera a su alcance para impedirle que llegara a Los Pinos, lo que logró por el camino más fácil: sumándose al candidato del PAN e imponiéndole condiciones a su apoyo, como fueron la dirección general del ISSSTE; la subsecretaría de Educación Pública; la dirección de la Lotería Nacional y la secretaría técnica del Consejo Nacional de Seguridad Pública para sus entonces amigos e incondicionales.
Tras el rompimiento con el Ejecutivo Federal y el PAN, y a su personal estilo, Gordillo se acercó a Enrique Peña Nieto, con el que estableció una estrecha relación política durante su gestión como gobernador del estado de México, comprometiéndose a apoyarlo con el SNTE y el Panal en la elección presidencial en caso de ser candidato del PRI.
A partir de ahí, dentro del partido que hoy preside Pedro Joaquín Coldwell, se planteó si esa alianza con el partido de la profesora chiapaneca le era o no conveniente al priísmo ante el riesgo de que en vez de sumarle votos, se los restaría, estando ella tan cuestionada de cara a la sociedad.
Tras romper la alianza y exhibir a los priístas, Gordillo buscará ahora seguramente acercarse de nuevo al panismo que, ante el riesgo en que está de perder la Presidencia de la República y sin tener hasta ahora candidato presidencial, es probable que la acepte, con lo que el camino de regreso del tricolor a Los Pinos se le podría dificultar, a pesar de estar hoy tan seguro de ello y de que los peñistas tan parecen sentirse en la residencia oficial que, como los labastidistas en 2000, ya hasta se han repartido anticipadamente cargos en los gabinetes legal y ampliado.
De esto y de aquello…Con esa ingenuidad política de la que ha dado sobradas muestras, Ernesto Cordero seguramente ve en el rompimiento de la coalición PRI-Nueva Alianza, su tabla de salvación para abandonar por fin el tercer lugar entre los precandidatos presidenciales del PAN, rebasar a Santiago Creel y alcanzar y hasta dejar atrás también a Josefina Vázquez Mota… Fue el ex secretario de Hacienda el primer contendiente blanquiazul por la postulación –y seguramente será el único de ellos- en darle una anticipada virtual bienvenida a Elba Esther Gordillo al PAN, al considerar que se debe estar abierto en su partido a una posible alianza con el partido de la profesora chiapaneca… No obstante, Luis Castro Obregón, presidente del Panal, se encargó de aclararle a Cordero que los plazos legales para formalizar una alianza con algún otro partido, ya vencieron y que, además, el partido propiedad de Gordillo participará en la contienda presidencial con candidato propio… Ofreció, sin embargo, que el Panal trabajará de manera conjunta “con quien resulte vencedor” en la elección presidencial del primer domingo de julio próximo… Y es que ayer, en una conferencia de prensa que ofreció en Irapuato, luego de un acto de precampaña, el panista favorito de Los Pinos a alcanzar la candidatura blanquiazul declaró que su partido está en posibilidad de analizar “con toda puntualidad y con todo cuidado” la posibilidad de una alianza con Gordillo y su partido… A la pregunta de que si cree que para el PAN es necesario aliarse con alguna otra fuerza política, respondió que aquel ha ganado solo y acompañado, pero que eso dependerá de ciertas coyunturas, de ciertas cosas particulares, que la dirigencia deberá valorar y tomar una determinación… Lo que habría que saber es si Elba Esther Gordillo estaría dispuesta a sumarse a Cordero y a su equipo en el que figuran algunos de los que la han acusado de corrupta y enriquecida… En la conferencia de prensa que el presidente del Panal ofreció ayer en la ciudad de México, aseguró que el diferendo que llevó a la ruptura de la coalición con el PRI no es con Enrique Peña Nieto sino con “la vieja guardia” de su partido que impide que se amplíe “el mercado electoral”…
Tras el rompimiento con el Ejecutivo Federal y el PAN, y a su personal estilo, Gordillo se acercó a Enrique Peña Nieto, con el que estableció una estrecha relación política durante su gestión como gobernador del estado de México, comprometiéndose a apoyarlo con el SNTE y el Panal en la elección presidencial en caso de ser candidato del PRI.
A partir de ahí, dentro del partido que hoy preside Pedro Joaquín Coldwell, se planteó si esa alianza con el partido de la profesora chiapaneca le era o no conveniente al priísmo ante el riesgo de que en vez de sumarle votos, se los restaría, estando ella tan cuestionada de cara a la sociedad.
Tras romper la alianza y exhibir a los priístas, Gordillo buscará ahora seguramente acercarse de nuevo al panismo que, ante el riesgo en que está de perder la Presidencia de la República y sin tener hasta ahora candidato presidencial, es probable que la acepte, con lo que el camino de regreso del tricolor a Los Pinos se le podría dificultar, a pesar de estar hoy tan seguro de ello y de que los peñistas tan parecen sentirse en la residencia oficial que, como los labastidistas en 2000, ya hasta se han repartido anticipadamente cargos en los gabinetes legal y ampliado.
De esto y de aquello…Con esa ingenuidad política de la que ha dado sobradas muestras, Ernesto Cordero seguramente ve en el rompimiento de la coalición PRI-Nueva Alianza, su tabla de salvación para abandonar por fin el tercer lugar entre los precandidatos presidenciales del PAN, rebasar a Santiago Creel y alcanzar y hasta dejar atrás también a Josefina Vázquez Mota… Fue el ex secretario de Hacienda el primer contendiente blanquiazul por la postulación –y seguramente será el único de ellos- en darle una anticipada virtual bienvenida a Elba Esther Gordillo al PAN, al considerar que se debe estar abierto en su partido a una posible alianza con el partido de la profesora chiapaneca… No obstante, Luis Castro Obregón, presidente del Panal, se encargó de aclararle a Cordero que los plazos legales para formalizar una alianza con algún otro partido, ya vencieron y que, además, el partido propiedad de Gordillo participará en la contienda presidencial con candidato propio… Ofreció, sin embargo, que el Panal trabajará de manera conjunta “con quien resulte vencedor” en la elección presidencial del primer domingo de julio próximo… Y es que ayer, en una conferencia de prensa que ofreció en Irapuato, luego de un acto de precampaña, el panista favorito de Los Pinos a alcanzar la candidatura blanquiazul declaró que su partido está en posibilidad de analizar “con toda puntualidad y con todo cuidado” la posibilidad de una alianza con Gordillo y su partido… A la pregunta de que si cree que para el PAN es necesario aliarse con alguna otra fuerza política, respondió que aquel ha ganado solo y acompañado, pero que eso dependerá de ciertas coyunturas, de ciertas cosas particulares, que la dirigencia deberá valorar y tomar una determinación… Lo que habría que saber es si Elba Esther Gordillo estaría dispuesta a sumarse a Cordero y a su equipo en el que figuran algunos de los que la han acusado de corrupta y enriquecida… En la conferencia de prensa que el presidente del Panal ofreció ayer en la ciudad de México, aseguró que el diferendo que llevó a la ruptura de la coalición con el PRI no es con Enrique Peña Nieto sino con “la vieja guardia” de su partido que impide que se amplíe “el mercado electoral”…
Ernesto Cordero
De esa manera, Castro Obregón reiteró lo que la presidenta vitalicia sostuvo el sábado en una reunión extraordinaria a la que convocó a los dirigentes seccionales del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación que cerraron filas con ella, ante la decisión de poner fin a la alianza con el PRI, misma que fue respaldada… O sea, según el dirigente, que la ruptura no fue con el precandidato presidencial único de ese partido sino con la cauda de viejos priístas que lo rodean y que a toda costa pugnaron por evitar que las candidaturas a diputados y senadores que se comprometieron a cederle al Panal sean para ellos… Ahí mismo, Mónica Arriola Gordillo, secretaria general de ese partido e hija de la dirigente magisterial, abundó en que no hay pleito con el PRI, esperanzada en que su candidatura de coalición al Senado en Chiapas, no se le venga abajo, a pesar de que constitucionalmente su postulación es impugnada porque no nació en la entidad… Basta darle un repaso a la lista de priístas que se registraron el mismo sábado pasado, para corroborar que entre quienes aspiran a un escaño senatorial son ex gobernadores, ex diputados y ex senadores, que buscan seguir pegados a la ubre legislativa y a contar con fuero constitucional ante una eventual acción en contra de ellos… El “chapulinismo” en el PRI de quienes dejan San Lázaro para llegar a la aun no acabada sede del Senado es claro ya que con presiones y amenazas encubiertas o abiertas, de organizar actos de protesta de militantes lograron cerrarle el paso a los militantes panalistas… En relación a lo ocurrido, Peña Nieto descartó consecuencias por el rompimiento de la alianza con el Panal al asegurar que ésta era sólo para construir respaldo y darle mayor competitividad a la contienda, por lo que dijo que él se someterá el escrutinio ciudadano durante su campaña, una vez que se convierta en candidato oficial del PRI… Con todo y la presencia de agentes federales, soldados, marinos y policías estatales y municipales en el operativo “Guerrero Seguro”, un grupo armado irrumpió en una misa de novenario en una comunidad de Atoyac de Alvarez y ejecutó a siete personas e hirió a cinco más… Eso deja en evidencia la campaña de promoción turística y hasta televisiva del gobernador aliancista de aquella entidad, Angel Heladio Aguirre, que sigue en la mira de los normalistas de Ayotzinapa para que sea destituido… Alejandra Barrales, lideresa de la Asamblea Legislativa del DF y quien fuera precandidata al GDF, decidirá esta semana si acude a las instancias electorales para impugnar la encuesta que favoreció por claro margen a Miguel Angel Mancera, ex procurador de Justicia capitalino…
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