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viernes, 2 de agosto de 2013

Deserción en bachilleres, problema grave y actual Por: Marco Antonio Figueroa Quinto

"Urgente disminuir la tasa de abandono de 650 mil alumnos por año, que en promedio es de mil 800 estudiantes que diariamente dejan sus estudios" Emilio Chuayffet
Secretario de Educación Pública
La mayoría de los padres de familia cuyos hijos cursaron la educación básica (en cualquiera de sus modalidades, secundaria general, telesecundaria o secundaria técnica), coincidirán con una verdad incuestionable, los jóvenes que abandonan el bachillerato lo hacen en los primeros 20 días debido a no comprenden lo que el maestro les está enseñando en este nivel, lo que hace muy alto el número de los que abandonan el bachillerato. La fuentes que tomamos ha sido el gran número de jóvenes que abandonaron el bachillerato, muchos de ellos incomprendidos sobre las causas principales que los hace abandonar sus propósitos de estudiar; culpándolos y culpando a sus docentes antecesores, sin ser realmente está la causa, pues hemos comprobado que muchos estudiantes dicen que no le entienden al maestro y cuando no entienden, lo menos en que piensan es en estudiar, se aburren, se distraen y se escapan de una situación molesta; lo que es una verdad que no queremos aceptar. Para los directivos de las escuelas de bachilleres oficiales se les hace fácil repetir que los jóvenes llegan al bachillerato sin saber leer, lo que motiva tal deserción; total siempre se acepta un número mayor de jóvenes, pues a los tres meses el número decrecerá al nivel de atención óptimo esperado. Si bien es cierto que muchos jóvenes llegan con una comprensión lectora muy baja a enfrentar disciplinas mucho más complejas, a libros de texto que están fuera de su alcance en términos de comprensión lectora, hay que reconocer que los docentes que han “heredado” las plazas docentes; en el mismo lugar que les deja su padre o un familiar cercano; no siempre tienen el perfil pedagógico para impartir las correspondientes cátedras, dando por consecuencia una confusión entre los alumnos que tienen la desagradable experiencia de soportar improvisaciones, negligencia, ineptitud y factores antipedagógicos; que aunado al sarcasmo y falta del “eros pedagógico” de estos docentes habilitados; el camino a la calle está asegurado. Pero volviendo a la encuesta, el 60.8 por ciento de los desertores abandonan sus estudios en el primer año, 26 por ciento en el segundo y 13.2 por ciento en el tercero, según el estudioso Gómez Morín, sentando que “los jóvenes no le encuentran sentido a la escuela, les aburre”. "Lo que está detrás de eso es la falta de capacidades académicas para enfrentar el bachillerato, por parte de los alumnos y de la escuela que no responde a las necesidades de los jóvenes". Gómez Morín, explicó que el déficit con el que llegan los alumnos al bachillerato está claramente expresado en los resultados de la Prueba PISA que aplica la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). "El 40 por ciento de los jóvenes (de 15 años) en la prueba PISA están por debajo del nivel dos, es decir no tienen capacidad para seguir aprendiendo; y no tienen capacidad de leer discursos complejos, de entender el propósito de un artículo, no saben cómo buscar información, identificarla y relacionarla o hacer inferencias. "Además hay otro 40 por ciento que está en el nivel 2, es decir, en el básico, tampoco tienen capacidad para comprender los contenidos complejos del bachillerato y para ello no están preparados", expresó. Frente a esta problemática, señaló Gómez Morín, prácticamente ninguna escuela hace nada por detener el abandono escolar. "Aquí hay un problema de que los estudiantes desertan de la escuela, pero las escuelas desertaron de los estudiantes; la escuela no se planteó la necesidad de atender a los alumnos integralmente con estrategias como la nivelación académica, engancharlos en los estudios, y darle un levantón en el primer semestre", sin duda esta problemática es uno de los mayores retos que tendremos que enfrentar, evitando ¡YA! esta práctica malévola de heredar plazas en este nivel, frenar estás prácticas que no sólo se dan en tierras veracruzanas con el aplauso frenético de los múltiples sindicatos convenencieros; que consideran tal estrategia como un logro sindical, sin ver el daño irreparable que le hacen a las nuevas generaciones en su legítima aspiración de una auténtica superación. El secretario de Educación Pública, Emilio Chuayffet, informó que pondrán en marcha "un ambicioso" programa de becas con el objetivo de que los jóvenes más pobres reciban una beca para acceder, permanecer y concluir la educación media superior, cuestión que expresó durante la clausura del Programa de Actualización y Profesionalización Directiva, el secretario aseguró que aumentará 80 por ciento la cobertura escolarizada en bachillerato, lo que implicará un reto muy grande que equivale a lograr sólo en seis años lo que se ha hecho en los últimos diez. Estaremos pendientes de todo cuanto acontece en este sistema de estudios, que ahora es obligatorio y necesita mejorar todo cuanto se ha hecho, pues en bachillerato se manifiestan los mayores índices de deserción y las causas –por lo que respecta a Veracruz- ya la sabemos, ahora queda en las autoridades resolverlas ¿O no? ¡Estamos!alodi_13@hotmail.com

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